Twitter y yo.

Sí. Llegó el momento…

Tenía que hablar sobre el pajarito. Y es que estoy harta. Muy harta, tremendamente harta. No voy a hablar de herramientas, ni de cómo darle mejor uso. Ni de cómo aumentar milagrosamente tus followers (aunque creo que esto ultimo, con pelín de franqueza y algo más de inteligencia, está chupado). Quiero haceros partícipes de apreciaciones personales. De cosas que me molestan.

Parto de la base de que me gusta, me divierte. Twitter me parece estimulante y está lleno de genios. Casi se puede decir que vivo una historia de amor/odio con esta red social (está frase me va a pesar, y lo se, y será utilizada en mi contra, pero lo asumo -y aquí escribiría un nombre- porque el sentido es figurado). Pero toda cara tiene su cruz. Gente plana, mala, retorcida y con sentido de humor inexistente, gente que busca el fallo cuando no aportan nada, que te esperan, escondidos, para saltar sobre tu cuello. Para tratar de romperte. Lo he sufrido en primera persona e, indirectamente, en gente a la que quiero.

Twitter no es un test de personalidad infalible. Es imposible juzgar a alguien por un unico tuit, un unico post, una unica afirmación. Tenemos la mala costumbre, como ya escribí hace mucho tiempo, de encerrar a la gente en cajitas en base a una sola idea. Y nos equivocamos. Siempre. No entendemos (ni nos interesa entender) que se puede estar en varias cajitas a la vez. Hay que leer (los que sepan) y comprender (esto ya es para nota…) y se puede concluir después de muchos tuits. Yo misma he etiquetado a gente como «de derechas», «de izquierda», «hooligans intratables» o  «blandurrios llorones» y después de mucho leer me he dado cuenta de mi gran equivocación.

Twitter me ha enseñado a NO JUZGAR. A entender que todos tienen (tenemos) una historia detrás, y que muchos tuits son el resultado de una situación personal puntual y pasajera. Es como un grito. No es eterno, ni es significativo. Solo tiene valor en el momento en el que se lanza.

Twitter no es dogma de fe. Nadie dice la toda verdad, muchos hacen un papel todo el tiempo. Otros lo interpretamos a ratos. Pocos van de frente. Otros vienen aquí a vomitar sus frustraciones y a esconderse tras un nick y un avatar y vierten su bilis, a chorro, por aspersión o a cubos. Tomarse lo que aquí ocurre a la tremenda, es un error. Por mucho que sea reflejo (que lo es) de lo que ocurre en el 1.0, está, sí o sí, distorsionado, y voluntariamente (salvo casos de incompetencia cerebral manifiestapor el emisor de la información. ¿El motivo? Subir el número de  followers, adquirir notoriedad, buscar un objetivo concreto, recibir una muestra de cariño, paliar la soledad (y estas dos razones son los que más legítimas me parecen), ninguno. TODOS.

Lo que no soporto en Twitter (porque no lo tolero en 1.0) lo que me molesta, me encabrona, me sobrepasa, son los «insultadores profesionales». Normalmente (y esto es una hipótesis) se incluyen el el grupo de ¿retrasados? ¿indaptados? ¿tocapelotas? que no te han leído lo suficiente y que juzgan por una milésima parte. Me molesta porque insultan y me molesta porque normalmente van por detrás. Es mucho más fácil recurrir a la falta de respeto, en lugar de a la dialéctica y a la imaginación. Pero es menos creativo, y requiere menos esfuerzo. Es altamente complejo para estos seres mononeuronales, tratar de defender con un argumento. El insulto, la descalificación personal, están siempre más a mano, pero dicen muy poco (o demasiado) del que lo usa. Es cobarde aludir a alguien por la espalda (y más con un insulto) sin darle una oportunidad de defenderse. Normalmente suele ser porque no se tienen más argumentos, claro. Sospecho, porque no lo se, y no debo juzgar, que esos encefalogramas planos de BIOS rimbombantes (que son muy dañinos), deben de ser dueños de existencias miserables, y otra vez, de nuevo, llega el reflejo, borroso, aquí, al Patio.

Luego están los que vienen a enseñarnos a los pobres mortales que vivimos en la ignorancia. Que ellos y solo ellos tiene las llaves del reino y que, o rindes pleitesía, o eres bloqueado. Pero éstos, los gurús, me importan menos, porque salvo en raras ocasiones, no hacen caso a las miserables hormiguitas que pululamos a su alrededor, y no suelen insultar, aunque morirían sin el botón de block. Es su insecticida particular.

Resumiendo: nada es lo que parece. Nadie puede ser juzgado solo por 140 caracteres. No somos dueños de la verdad y debemos aprender a relacionarnos sin juzgar y desde el respeto.

Pero parece misión imposible. No: lo es.

PD. Y Twitter, no es mi vida (esta afirmación CATEGÓRICA, porque es sobre mí, es una dedicatoria personalizada. Ya tú sabes…)

45 pensamientos en “Twitter y yo.

  1. No se en que lugar pondrás este comentario, pero me ha gustado mucho, aunque corto, daba gusto leerte. Un beso.

  2. Me encanta leerte por como escribes y lo que dices y completamente de acuerdo con lo dices… yo mantengo ese mismo amor/odio que me hace de vez en cuando desaparecer de twitter por un tiempo (como ahora).

  3. Que razón tienes en lo que has escrito, twitter es todo eso pero yo me quedo con la parte de la gente buena divertida y que con opiniones distintas podemos respetarnos, de los otros paso y desde luego me quedo contigo por lo que me río me «carcajeo» y sería muy aburrido gustar a todo el mundo.
    Y por supuesto hay que pasar de los que quieren dar lecciones los «gurus» aysss esos son los que nos les hacen caso en ningún sitio
    un besote guapa
    Bego
    @bego48

  4. Hola Peich!!!!! Tiempo que no te leia 😦
    Excelente escrito como siempre! Y muy de acuerdo con tus apreciaciones y comentarios.
    Fuerte abrazo!

  5. ¿Y qué hacemos reina mora? La odiamos y queremos a partes iguales, pero es tremendo la que nos cae muchas veces.
    Yo estoy igual que tú..
    Un beso, guapa!

  6. Los «buenos»: tarde o temprano se les engancha en algún tweet la piel de cordero y dejan al descubierto su carne mortal… A los insultadores profesionales me los imagino como sebosos frikis llenos de granos, sudados y vestidos de negro; con las persianas bajadas debido a la fotofobia que les atenaza y con alopecia prominente debido al exceso seminal… y ya no me molestan tanto sus tweets-basura…
    Y a los listos, que les den por donde amargan los pepinos…
    Queremos (hablo en plural gurustático yo también) seres humanos normales… Genial post y disculpa el mitin

    • Somos fuertes, somos grandes y nos temen.
      Y como no tienen dos dedos de frente utilizan el la ofensa como defensa de un ataque que ni siquiera existe, porque nos la sopla.

      Un beso inmenso, mi Flor. Sabes que te quiero.

  7. No suelo dejar comentarios, sobre todo cuando estoy deacuerdo con lo que leo, porque me parece que ya está dicho, (bueno, y porque soy un poco vergonzoso). Intentaría resumir tu post con un refrán, «El mejor desprecio es no hacer aprecio», y punto. Gasta tus energías para lo que mola, a todo lo demás que le den, utiliza también el botón de bloqueo y tan pancha, hay tantas cosas de las que hablar, que gastar tiempo en darles importancia a est@s fracasad@s es malgastarlo. Tú molas y lo sabes, así que dedícate a los que nos molas. Ya está.

    @Llantias (Un marciano en la tierra)

    • Mi marciano favorito, además.
      No sabes lo que me gusta leerte aquí. Hay comentarios especiales, y el tuyo es uno de ellos.
      Un beso terrestre. Y rubio.

  8. Me ha encantado,mi reina, dices las verdades del barquero! Para mi eres una tia valiente, muy cañera,pero objetiva y respetuosa. Creo que les jode que tengas tantos seguidores, la envidia es muy mala… Bicis

  9. Como siempre, nos encanta como escribes 🙂 Lo bueno de Twitter es lo bueno que hay en ti, y lo malo afecta según tú te veas: relativizar es la clave. El que insulta, no tiene cabida en ningún mundo, real, virtual o mental. Las personas con buen corazón y que aportan, son las que permanecen.

  10. A menos que se pueda probar que aquellos valores en apariencia diferentes son en realidad proporcionales, tendría que haber tres modelos de crítica distintos: el primero basado en la construcción, el segundo en la utilidad y el tercero en la estética. Cada uno podría ser razonable, completo y, dentro de su propia esfera, válido. Todas las demás…sobran, aunque estén.

    Como siempre, o casi siempre, estoy a tu lado, archiduquesa.

  11. rubia guapa, la agresión es una carta dirigida a tí que puedes decidir no abrir, o devolver al remitente. es más fácil decirlo que hacerlo, pero se puede conseguir. con lo que disfrutras y lo que disfrutamos de tí en twitter, devuelve las cartas que no quieras abrir y a lo tuyo. un besazo

    • Ter haré caso, mi Gurusa, porque sabes que siempre (o casi siempre) te lo hago. Pero a veces la curiosidad es fuerte. Otras veces te despietas y estás machete en mano, lanzallamas en otra repartiendo cera.
      Prometo fijarme bien en mis cartas de ahora en adelante.
      Un beso, mi niña.

  12. Plas, plas, plas!! no lo había leído hasta hoy, pero lo has descrito a la perfección.

    Hay una frase que me ha gustado especialmente: «Para tratar de romperte», esa frase resume perfectamente esa gente que pulula por twitter con la única intención de hacer daño gratuitamente a los demás.
    Putear y dañar porque sí, por el solo placer de hacerlo.

    Un besote, querida!! :*

    • Hay gente con un desmedido gusto por jorobar a los demás. Aun no entiendo el afan de muchos por hacer el mal; a veces pienso que es una perversion sexual (¿o una falta de sexo?)
      Un beso inmenso para ti :*

  13. Yo diría que Twitter a veces, es como una discoteca: La primera vez que entramos en Twitter, no tenemos claro de que manera nos puede llegar a afectar, si, a afectar. Como la primera vez que entras en una discoteca y todo te parece gente superguai. Creo que con el paso del tiempo, al igual que cuando volvimos a las discotecas, ya éramos más precavidos, veíamos a los chungos de lejos y nos relacionábamos mas selectivamente, aunque al igual que en Twitter, alguno se nos acaba escapando y preparándonos una muy parda. #CosasDelTwitter #CosasDelDirecto

    En fin, que me parece muy bien escrito ( pelín cortito XDDD ) y que me apunto al blog. #HeDicho Un besazo, guapaaaa !!! : )))

  14. Hola Peich: apenas llevo un mes en twitter pero llevo unos cuantos años moviéndome por el mundo de los chats. Digo ésto porque por lo que te he leído, y a pesar de las diferencias que hay entre la forma de escribir en twitter y en un chat, veo que las problemáticas son exactamente las mismas. Ese tipo de personajes que entran a insultar, a molestar e incluso, en los casos más graves, a intentar destruir a una persona, son lo que en argot internetero se les llama trolls.
    Gente que su único objetivo es destrozar una conversación en una sala de chat, bien sea soltando su cuatro palabras mal sonantes atrayendo la atención sobre él, o bien yendo descaradamente a por una persona. Lo mejor en estos casos es pasar olímpicamente de ellos, te lo digo por experiencia. Sé que es duro estar leyendo tonterías dirigidas hacia uno, incluso dan ganas de ponerte a su nivel y responderles de la misma manera, pero es eso precisamente lo que persiguen: captar tu atención de esa manera. Es triste pero es así. Por eso te recomiendo (si me lo permites) que hagas caso a un dicho que circula por internet sobre la manera de actuar hacia esta gente, y es el siguiente: Don´t feed the troll (no alimentes al troll). Al final se acaban cansando porque les eliminas la única posibilidad de su existencia, que es amargarte a la vez que lo haces protagonista.
    Un saludo y me alegro de haberte leído. Seguiré haciéndolo tanto en twitter como aquí.

    @xtremmmme

    • La gente desconoce que se pueden decir muchas más cosas con educación que faltando al respeto.
      Al margen, es cierto: hay mucho toca narices profesional.

      Gracias por tu pasarte por aqui.

  15. Me gusta el resumen: nada es lo que parece. Twitter no deja de ser una gran plaza de pueblo, donde algunos van con disfraz de cabeza a los pies, otros van con antifaz, otros a cara descubierta y otros van cambiando de rol en función de sus circunstancias. Preferiría que la gente entrara en la plaza a cara descubierta y fuera respetuosa, pero allá cada uno, los demás somos libres de hacer un follow/unfollow, que es más fácil que quitarse de encima a un tipo coñazo en la plaza de toda la vida.

    • Twitter es un reflejo un tanto turbio del 1.0. Esconderse tras un oprdenador da falso valor a mucha gente, lo que es muy peligroso es según qué circunstancias.
      Muchas gracias, Javier.

  16. La verdad estoy completamente de acuerdo.
    Yo no tengo mucho que aportar, y a demás, no hay muchos que puedan aprovechar y/o valorar los aportes.
    Para ser honesto, siempre me hago una idea y opinión de cada persona por sus twits, pero la voy puliendo y me la guardo en absoluta reserva, es decir tengo cajitas de distintos tamaños con una clasificación muy dinámica.
    Por lo demás, solo hago aportes puntales para personas que lo solicitan y/o necesitas, mayormente, twitter para mi, es una fuente de información, así como hay quienes reportan hasta cuantas cucharadas de sopa consumieron, otros solo leemos, filtramos y conservamos lo que nos importa.
    Respecto al uso mas provechoso, es una pregunta personal, por que al fin del día, cada uno va a hacer lo que le plazca.

    • Pues me parece una postura sensata e inteligente. Solo discrepo en una cosa: todos tenemos algo que aportar.
      Muchas gracias por visitar mi Caja.
      Abrazo

  17. Impresionante, acabo de llegar, como aquel que dice y me gusta pasar desapercibida pero sí he podido observar lo que dices…no entiendo el afán de protagonismo de muchos, ni la necesidad de humillar a los demás de otros….como tú, me quedo con la gente sana, con ganas de compartir cosas, de crecer conociendo a gente interesante, y sobre todo de reír…. para todo lo demás «NO HAY MAYOR OFENSA QUE LA INDIFERENCIA»….besos guapa, no vale la pena cabrearse….

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